Rincón de la droja

Aquí, en este ángulo de noventa grados formado entre dos paredes, es donde se receta el remedio contra el dolor agudo de muelas que sufre la lengua española. Por supuesto, era necesario todo este eufemismo en lugar de decir directamente «rincón de la droja» —con errata adrede; no hacemos apología de los estupefacientes, por muy irónico que suene—.

En vez de coger polvo, como en los rincones normales y corrientes, se acumulan consejos, curiosidades, aclaraciones, lecciones, desmitificaciones y otras cosas, fruto del aburrimiento de quien suscribe estas palabras, relacionadas con la lengua.

Lo mejor de todo es que cada una de las entradas goza del sello de calidad De Sousa, que garantiza el rigor que se merece. No, no tenemos nada que ver con él ni lo conocemos en persona, pero ¡anda lo molón que queda y la credibilidad que aporta!

No esperes más y empieza a tomar tu dosis de drojas publicadas pinchando aquí.